El desafío del desarrollo energético
El presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, explicó cuáles son los retos del sector y se mostró optimista sobre la oportunidad que representa Vaca Muerta.
El último panel de la jornada tuvo como protagonista a Miguel Gutiérrez, presidente de YPF, que habló del rol de la empresa en el desarrollo energético de la Argentina y resaltó la oportunidad que representa Vaca Muerta para el país.
El moderador fue el profesor Guillermo D’ Andrea, quien primero quiso saber cómo fue la entrada de Gutiérrez a YPF, ya que el empresario venía de trabajar en un área muy distinta.
“Yo trabajé como presidente de Telefónica desde 2001 hasta 2003. Antes había estado en JP Morgan Buenos Aires, pero también trabajé en Brasil, España, Londres, Tokio y Nueva York”, sintetizó el empresario.
Gutiérrez contó que se sumó al directorio de YPF el 10 de diciembre pasado y aseguró que, aunque ingresó en una industria que no conoce, puede aportar su experiencia de otras industrias.
“Vaca Muerta el principal proyecto de inversión que tiene la Argentina y creo que debería ser un excelente punto de unión para una política pública”
“Cuando entré en Telefónica tampoco sabía de telecomunicaciones, al final del día uno gestiona equipos y lo importante es que sean multidisciplinarios. Yo no creo que la fórmula de una sola persona puede tener éxito y menos en compañías de este tamaño”, añadió.
Gutiérrez confesó que para él fue muy emocionante llegar a YPF, ya que él no tuvo las mismas oportunidades que sus padres, inmigrantes españoles de escasos recursos que se asentaron en Mataderos. “Nunca hay que olvidar de donde uno viene”, agregó.
Luego, D’ Andrea quiso saber qué escenario encontró cuando ingresó en la empresa. “Encontré un grupo humano excelente, hay un gran talento en toda la compañía. Lo interesante es que la gente lleva la camiseta y se queda muchos años en la empresa, a pesar de que la compañía ha pasado por varias etapas: estatal, Repsol, Repsol- Eskenazi”, respondió el ejecutivo.
Uno de los desafíos de Gutiérrez en YPF es que el grupo sub40 de la compañía, que el ejecutivo describió como “muy entusiasta”, tenga posibilidades de crecimiento. “Mi idea es destapar la olla del talento. Ojalá cuando yo me vaya eso sea lo que se vea”, confesó.
A continuación, D’Andrea le preguntó sobre el escenario de la producción energética en la Argentina. El ejecutivo explicó que en nuestro país existe, por un lado, la producción convencional, es decir la extracción de pozos maduros (que tienen entre 20 y 50 años) y, por el otro, están los reservorios de gas que, según Gutiérrez, han sido muy importantes. Y la tercera pata es Vaca Muerta.
“Mi idea en YPF es destapar la olla del talento. Ojalá cuando yo me vaya eso sea lo que se vea”
El ejecutivo consideró al yacimiento en la cuenca neuquina como “más que una promesa” para el país. “Es el principal proyecto de inversión que tiene la Argentina y creo que debería ser un excelente punto de unión para una política pública, porque esto no se desarrolla en dos días”, añadió.
Gutiérrez dijo que aunque hay que bajar los costos para que Vaca Muerta sea viable, la buena noticia es que ya se empezó a trabajar y hay una colaboración entre los sindicatos, las provincias y el Estado.
Para concluir, D’Andrea comentó que Vaca Muerta es una gran oportunidad para la Argentina. “Podemos ser Noruega o quién sabe qué”, bromeó. Por su parte, Gutiérrez volvió a afirmar que el proyecto es una oportunidad para que distintos actores de la actividad pública se pongan de acuerdo. “En el corto plazo el objetivo es el autoabastecimiento energético, después está el exceso. Esto trasciende muchas presidencias”, sostuvo.
