Con motivo de los 40 años del IAE, entrevistamos a un alumni de cada camada, desde 1978 hasta 2017, para que cuenten cuál es el valor agregado que les dejó su paso por la institución, qué significado le dan al liderazgo y qué les aportaron los profesores
A continuación, la segunda entrega de la serie en la que diez alumni, que cursaron entre 1989 y 1998, cuentan su experiencia en el IAE
Alejandro Roggio: 1989
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-Como mi título de grado es el de arquitecto, sin duda estoy entre quienes más provecho obtuvieron del MBA. Lo malo era que me tocaba discutir con administradores, economistas e ingenieros, que además eran unos aviones… Pero pasados los apremios de los primeros meses, también eso fue muy estimulante. Más allá de los muchos conocimientos adquiridos, creo que el hábito de análisis del problema, discusión en grupo y toma de decisiones que me dio la repetición de la dinámica del caso fue probablemente lo más valioso, además de un grupo de amigos muy querido.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Pienso que un líder es alguien con una visión, capaz de contagiar a otros su entusiasmo por esa causa, pero también de obtener lo mejor de cada uno para lograr el objetivo común. El IAE, por un lado, me permitió reflexionar sobre los valores que deben sustentar el liderazgo, pero además el continuo trabajo en equipo y la posterior discusión en clase me resultaron en ese sentido una gimnasia y un aprendizaje sin duda tan importantes como los aspectos conceptuales recibidos.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
-Es evidente que el alma de una escuela de negocios no está en su infraestructura y ni siquiera en sus planes de estudio, sino en sus profesores. En ese sentido, pienso que todo lo bueno que recibí en el IAE se lo debo principalmente a ellos, y me siento muy agradecido.
Carlos Becco: 1990
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-El valor agregado de mi paso por el IAE lo puedo resumir en tres puntos: una sólida formación académica, un intenso entrenamiento para poder enfrentar las más variadas situaciones y desafíos que podremos encontrar en el apasionante mundo de los negocios y una extraordinaria red de contactos y relaciones.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Ser un líder significa fijar una dirección, elegir una tripulación y alcanzar un objetivo. Y ser capaz de lidiar efectivamente con todo lo que sucede en el medio. El IAE ha sido muy valioso como una fuente de inspiración, de modelos a seguir y de experiencias. Particularmente destaco el valor del IAE en su foco en fijar objetivos que están bien por encima de objetivos puramente numéricos y cuantitativos. La formación del IAE ha sido instrumental para mi formación como empresario con responsabilidad social.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
-Valoro de los profesores del IAE su sólida formación profesional y académica, sus valores humanos y su humanidad, calidez y accesibilidad.
Marcelo Dumanjó: 1991
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
Hice el EMBA hace muchos años, cuando claramente era una gran ventaja competitiva en un mercado laboral en la Argentina que era bastante más dinámico que en la actualidad. Las herramientas que el IAE me dio me permitieron tener una visión mucho más amplia a la hora de tomar decisiones de negocios. Hoy en día, me atrevería a decir que es imprescindible contar con un MBA/EMBA para aplicar a cargos directivos de jerarquía tanto en la Argentina como en el exterior.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
Ser un líder significa ser quien más puede influenciar en otros acerca del rumbo que una organización o grupo de personas deben tomar en el contexto en el que les toca actuar. Implícitamente, significa poder tener la suficiente credibilidad del grupo que le toque liderar para obtener los resultados esperados, sobre todo cuando estos requieren de gran esfuerzo y coordinación. Los grandes líderes son aquellos que logran todo esto, fundamentalmente, cuando las condiciones en las que les toca actuar son adversas o no cuentan con todos los recursos necesarios para lograr los objetivos planteados.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
Valoro mucho los atributos académicos que poseen, el amplio conocimiento de la realidad local, donde a veces las recetas de otras geografías no funcionan del todo, y también la dedicación y el compromiso con los que desarrollan sus actividades académicas diariamente.
Diego Buracco: 1992
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-Mi percepción del valor agregado de mi paso por el IAE fue variando. A medida que fui ganando experiencia en mi vida empresaria, pude ir relacionando estas nuevas experiencias con los contenidos de las materias que había cursado. Hace 26 años tomé la acertada decisión de continuar mi formación de ingeniero en el IAE. Los cursos me hicieron comprender mi ignorancia sobre muchísimos temas que hacen a la vida empresaria . Describir el valor agregado recibido es, para mí, una tarea imposible porque he utilizado lo aprendido en toda mi carrera profesional. El valor, incalculable.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Para mí, ser líder es hacer tu propio camino. La formación recibida no fue solo técnica. La forma de entender la empresa y los aspectos profesionales y humanos relacionados constituyen el bagaje principal de desarrollo personal. Ser un líder es mucho más que tener una empresa exitosa. Es actuar con convicción y estar íntimamente conforme con el camino elegido (independiente del resultado).
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
El profesionalismo y la calidad humana. Me quedó en mi memoria, la dedicación y el interés personal que han puesto en mí durante y después de los cursos recibidos. A 25 años de haber cursado, valoro el concepto inculcado sobre la necesidad de adaptarnos al cambio permanente en que nos toca desenvolvernos.
Sigrid Tolaba: 1993
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-Había terminado mi carrera de grado y, casi por casualidad, conocí el IAE. Eran años en los que el acceso a la información, la especialización de formación profesional e incluso las posibilidades de viajar eran limitados. Por eso, descubrir el programa del IAE me entusiasmó y fue un gran desafío. La experiencia completa fue una expansión exponencial de mis fronteras de conocimientos. Y destaco un aspecto que aún hoy me sigue sorprendiendo. Hace veinticinco años, aprendimos la importancia de la integralidad de las personas, los aspectos humanos en las organizaciones, la responsabilidad social empresarial, temas que hoy felizmente han cobrado enorme importancia.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
- El IAE me ayudó a comprender la oportunidad y la responsabilidad de dirigir personas. Aprendí a usar herramientas, aprendí sobre mis propios procesos personales, aprendí de mis compañeros, que, además de tener admirables caminos profesionales, fueron muy generosos con la diversidad de género (éramos dos chicas en una comisión de 80 varones).
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
En muchos casos, sus clases me emocionaron, me motivaron y son un gran recuerdo. José Luis Gómez Egea, que fue mi profesor de Finanzas en segundo año, para un proyecto me arengó a soñar más allá de mis posibilidades, a pensar en grande, mucho antes que el popularizado eslogan.
Gustavo Carlos Paz: 1994
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-El IAE me ha dejado como valor agregado la posibilidad de pertenecer a un grupo humano fantástico, de sólidos valores y de un altísimo respeto por la diversidad de pensamientos y de un sentido de colaboración admirables. En los casi 25 años que llevamos de graduados continuamos en permanente contacto. Pertenecer a este grupo humano, es el real valor agregado que me ha dejado mi paso por el IAE.
-¿Qué significa para vos ser un buen líder? ¿Qué herramientas te aportó el IAE en este sentido?
-Un buen líder deberá contar con una buena dosis de inteligencia emocional para así ajustar su estilo de acuerdo al contexto y la situación que se enfrente. A su vez, poseerá un conjunto de habilidades y capacidades, y tal vez la primera en la lista sea ͞la visión͟. Esta deberá ser muy clara y simple, para que pueda ser comunicada efectivamente e inspire al equipo a alcanzar niveles de rendimiento superiores a los esperados. Al mismo tiempo, un buen líder deberá ser determinante en la toma de decisiones, íntegro, auténtico, humilde y un apasionado por el éxito del equipo por encima del individual.
-¿Qué es lo que más valoras de los profesores del IAE?
-Son excelentes líderes la educación. Su misión es formar los líderes del mañana y lo hacen de manera apasionada y bien balanceada, entre lo racional y lo emocional, y siempre con un sentido práctico y realístico. Transmiten altísimos valores de vida, tanto para el profesional como para el individuo y su familia, y con un alto sentido de la humildad.
Luis Clementi: 1995
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-Recibir una formación de excelencia a través de un cuerpo docente de altísimo nivel, y la discusión de los casos con el aporte de varios puntos de vista, impulsando el análisis holístico de las diferentes situaciones. Además, el trabajo en equipo, que incorpora la riqueza de los compañeros de grupo y es donde se mezclan distintas historias personales, profesiones, experiencias, rubros y expectativas. Pero el factor más relevante y distintivo que valoro es una forma de pensar y analizar los casos y situaciones a través de los valores humanos, personales y profesionales.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Un líder debe comprender a la naturaleza humana y es quien tiene la capacidad y la responsabilidad de contagiar un sueño, un desafío, una meta concreta (chiquita o grande). Es aquel que con su entusiasmo inspira, motiva, colabora, empuja, y es el primero y el último. Su dedicación e interés en hacer las tareas con excelencia muestran el camino y, en general, predica con el ejemplo.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
-Su preparación concreta y específica, la experiencia, y su gran capacidad de comunicación y síntesis para hacer ver lo relevante. Además, su empatía para convivir con personalidades diversas y orientarlas.
Luis Germán Jahn: 1996
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
El IAE me ha dado muchas cosas, la que más valoro fue la oportunidad de compartir una experiencia académica con directivos de distintas industrias y formación profesional. La discusión de los casos era muy enriquecedora, soy ingeniero industrial y ver la forma y enfoques con que abogados, economistas, licenciados en administración, contadores, médicos y emprendedores abordaban y analizaban los mismos problemas y desafíos me abrió la cabeza. Comprender su forma de pensar amplió mi capacidad de gestión e interrelación con pares, jefes y colaboradores.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Ser un líder es definir y alcanzar objetivos, generando cambios que contribuyan al crecimiento personal y profesional de equipos y personas, alineando intereses generales e individuales en beneficio de stakeholders y de la sociedad. En este sentido el IAE me aportó capacidades de planificación, evaluación de desempeño, comunicación, motivación y gestión del cambio.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
-Sus valores, ética y capacidad de comunicación e intercambio de ideas, conocimientos y experiencias. La buena onda. También soy docente universitario desde 1981 y sus técnicas mejoraron mi capacidad de enseñanza.
Fabiana De Nicoló: 1997
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
El paso por el IAE significa un antes y un después en la vida de cualquier persona. Mi camada, en 1996, fue la última en estudiar en el edificio de la calle Agüero y en aquella época éramos solo un 10% de estudiantes mujeres, situación que por suerte fue cambiando con el tiempo. La profundidad de los casos estudiados, el trabajo en equipo, la mirada internacional, la interacción con compañeros de diferentes formaciones profesionales sin duda, me prepararon para poder afrontar las altas exigencias de la realidad laboral.
- ¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
Ser un líder es inspirar a otros para seguir un determinado camino, y esto no siempre tiene que ver con la autoridad o la jerarquía. Las habilidades hard son más fáciles de adquirir, pero las habilidades soft son las más difíciles de aprehender y las que se consiguen solo con experiencia y práctica diaria. El IAE proporciona una mirada diferencial sobre temas que no se estudian comúnmente en las universidades, esas habilidades soft que hoy hacen la diferencia en los cargos directivos.
- ¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
- Los profesores tienen una preparación académica de excelencia, con maestrías y doctorados en el exterior que enriquecen no solo su conocimiento, sino también su experiencia docente. Pero por sobre todo, siempre encontré una calidad humana muy alta en todo el personal docente y no docente del IAE, que hace que uno recuerde con mucho cariño el paso por sus aulas.
Cristina Bomchil: 1998
-¿Cuál es el valor agregado que le dejó su paso por el IAE?
-El paso por el IAE me dejó una riquísima experiencia. El grupo de colegas con los cuales interactúe fueron de un nivel muy profesional y excelentes como personas. Sigo en contacto con varios de ellos. El programa me resultó una bocanada de aire fresco en cuanto a la aproximación a las nuevas tendencias del momento y a la inmersión en temas hasta ese momento desconocidos para mí. El método de estudio de casos fue muy ameno y llevadero.
-¿Qué significa para usted ser un líder? ¿Qué herramientas le aportó el IAE en este sentido?
-Ser un líder es inspirar, compartir y transmitir valores y una visión, y poder ejecutarla en lo diario y en el largo plazo. Es ser el guardián del propósito de tu compañía. Es ayudar a que tu gente se desarrolle para que sea la mejor versión de sí misma. El IAE cree fuertemente en el liderazgo a través de valores sólidos, del ejemplo y de la conducta consistente e intachable. Por encima de cualquier aprendizaje que el IAE imparta, está presente esta concepción profundamente humana y ética del líder.
-¿Qué es lo que más valora de los profesores del IAE?
-Valoro su compromiso, su dedicación, su humildad y su total involucramiento con los alumnos, que son el foco de su rol. Valoro que transmitan valores cristianos y que, por ello, todo lo que enseñan sea pensado en función de dar el máximo, desinteresadamente, a los que los rodean, para que sean no solo mejores profesionales sino, sobre todo, mejores personas.