Héctor Pourtalé, Alumni Mentor, MBA 2013, es Head de Movimiento Salud 2030, plataforma que reúne a sectores públicos y privados con el objetivo de desarrollar planes de salud y soluciones globales.

Héctor Pourtalé es Head de Movimiento Salud 2030, una cruzada mundial que reúne a instituciones públicas y privadas para cocrear soluciones que respondan a prioridades del sistema de salud. Además de Argentina, el movimiento suma aliados en Costa Rica, Chile, Perú, Colombia, Brasil, México, Ecuador y Uruguay, y otros 20 países.

Se pusieron una meta ambiciosa: desarrollar en los próximos 10 años planes a largo plazo para transformar el modelo de salud. Están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, al fomentar alianzas público-privadas, promover la salud y las oportunidades de negocios.

“Para mejorar la calidad de vida de las personas, hay que empezar mucho antes de que ingresen en el sistema de salud”, indica Pourtalé.

Empoderar al paciente
En sus 35 años, Pourtalé acumuló experiencias alrededor del mundo. Terminó el colegio secundario en Italia, estudió Humanidades en Brasil y en los Estados Unidos cursó un advanced degree en humanidades y un bachelor en filosofía. Trabajó en el sector educativo en Chile y ya en la Argentina se volcó a su formación empresarial porque sentía que era “la mejor forma de hacer una diferencia”.

Comenzó a estudiar Ciencias Empresariales, hasta que descubrió la posibilidad de hacer el MBA en el IAE Business School. Su pasión por el área de la salud surgió mientras cursaba: “La salud es un bien intangible, casi inmedible, pero hay que gerenciarla con recursos finitos. Me atrajo ese desafío y la necesidad de aplicar ética para lograrlo. Pensé: ‘Seguro que voy a poder llevar toda la carne al asador de todo lo que aprendí y viví hasta ahora’”.

Después del MBA, el Alumni trabajó casi 8 años en Novo Nordisk y en Roche. Cuenta que Movimiento 2030 nació en 2020, en colaboración con el Copenhagen Institute for Future Studies y la consultora Board of Innovation, a partir de dos preguntas concretas: ¿por qué estamos siempre hablando de los mismos diagnósticos y no podemos generar soluciones? ¿Cómo evitar caer en los mismos errores?

“Duplicamos la expectativa de vida a nivel global, pero en reductos poblacionales hay personas muy lejos de esa longevidad. Necesitamos democratizar las soluciones y los beneficios. Queremos un sistema de salud construido de cara al futuro no al pasado”, resalta.

El primer paso del movimiento fue establecer prioridades, siendo la primera la disponibilidad de la información, para que las personas puedan tomar decisiones sobre su salud basadas en datos.

La segunda prioridad es que las inversiones en el sistema de salud tengan mayor valor. “Los presupuestos de salud suelen estar por debajo de lo recomendado por la OMS. Y, de lo poco que se invierte, se subejecuta. Por eso, queremos encontrar formas para que lo que usemos esté mucho más anclado a los resultados que necesitamos”, explica Pourtalé.

En Costa Rica, el Movimiento 2030 está trabajando con todo el sector de salud para identificar los aspectos clave que la siguiente presidencia debería trabajar. Armaron un debate con los candidatos presidenciales para crear consensos que trasciendan a las gestiones individuales y gobiernos.

Reunir a los sectores públicos y privados puede parecer una misión compleja, pero Pourtalé asegura que suele haber una gran voluntad de estrechar vínculos. “Sin el sector público, el privado no puede tener tanto impacto. Y, por otro lado, el privado tiene soluciones disruptivas e innovadoras frente a problemas puntuales”, comenta.

Da el ejemplo de Salud.uy, plataforma de salud digital en el país vecino que depende directamente de la Presidencia. “En Uruguay la salud digital es una prioridad nacional. Podemos aprender de esos modelos”, indica.
Un sistema de salud más proactivo que reactivo.

¿Cómo es el modelo de salud al que apunta el Movimiento 2030? “Lo más importante es que sea preventivo, personalizado y que tenga al usuario como protagonista. Este sistema permitiría que las soluciones estuvieran al alcance de todos, con habilitadores como la conectividad a Internet”, ilustra el CEO.

En Argentina, están trabajando con la Fundación Bunge y Born en el Municipio de Pilar y en la Provincia de Buenos Aires, para identificar mecanismos que midan el riesgo de pacientes con enfermedades cardiovasculares que no estén yendo al hospital y mantener un buen cuidado de su salud de manera remota. “Poder monitorear la salud no debería ser un privilegio de quienes tienen un smart watch”, señala Pourtalé. Justamente, está en curso hasta el 31 de diciembre el Argentina Open Challenge impulsado por Movimiento Salud 2030, para crear soluciones innovadoras que faciliten el seguimiento cardiovascular a distancia.

Además, Pourtalé cuenta que están trabajando con expertos en legislación digital y en informática para identificar cómo intercomunicar a las instituciones más rápidamente. “Sería como inventar autopistas entre hospitales para que la información de los pacientes pueda fluir”, explica. Cuenta que en los países nórdicos está prohibido preguntarle dos veces lo mismo a una persona en el sistema de salud. “La información clave y crítica para tu salud debería estar disponible”, afirma.

Si hay algo que el MBA del IAE le aportó al Alumni es preparación para asumir riesgos y compromisos, algo que se entrevé al conversar con él sobre un plan tan ambicioso como necesario: construir el modelo de salud del futuro.