Carlos Annes, EMBA 1995, es gerente general de MSD en México
- ¿Qué significa haber recibido la autorización de uso de emergencia en el mundo para el tratamiento antiviral oral para Covid-19 por parte de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido?
- La autorización de emergencia es un tipo específico de autorización que las agencias sanitarias a nivel mundial han estado otorgando a ciertas vacunas y medicamentos utilizados para tratamiento de covid-19. Permite a los gobiernos adquirir los medicamentos y vacunas para combatir la pandemia de covid-19 en tiempos muy inferiores a los normales para otras terapias. En el caso del antiviral molnupiravir, se trata del primer antiviral de uso ambulatorio para el tratamiento de la enfermedad provocada por covid-19 leve a moderada, de administración oral que ha demostrado reducción de hospitalizaciones y muertes en personas infectadas, con estudios in vitro específicos ante la variante ómicron.
-¿Cómo respondió la industria farmacéutica a la pandemia?
- Ha respondido de diversas formas. Investigando, desarrollando y produciendo vacunas y medicamentos contra el covid en tiempo récord. A la vez manteniendo inclusive en los peores momentos de infecciones en el mundo la producción de los múltiples medicamentos y vacunas que la sociedad consume (a diferencia de otras industrias que han podido parar, la farmacéutica ha seguido produciendo teniendo que tomar muchos recaudos especiales para evitar contagios masivos en las plantas). Y, por otro lado, lo mismo ha sucedido con la mayoría de los estudios clínicos de investigación y desarrollo de otras terapias. En el caso de MSD, el 100% de los estudios de investigación han continuado y los pacientes enrolados en los mismos continuaron en terapia sin interrupciones.
-¿Qué grandes cambios cree que se introdujeron y que llegaron para quedarse? ¿Cree que las pandemias cada vez se volverán más frecuentes?
-La pandemia nos ha cambiado de manera radical la forma de trabajar y de relacionarnos laboralmente, de capacitarnos, de estudiar, de adquirir bienes, dando protagonismo a las tecnologías digitales, esquemas remotos, virtuales. En las empresas se ha generado una situación de empoderamiento y confianza especial en los empleados donde se trabaja más por objetivos. La flexibilidad le ha permitido a los empleados, por un lado, aprovechar mejor su tiempo al eliminarse los tiempos ociosos de traslados y de trabajar desde sus casas si por alguna situación familiar le resultaba más. A la vez, se ha generado una frontera difusa entre lo laboral y lo personal donde los empleados con frecuencia terminan trabajando muchas más horas y se les dificulta poner límites. En algunos casos ha tomado tiempo la adaptación a lo remoto por falta de espacios físicos en los hogares y recursos tecnológicos y para ciertas tareas que requieren creatividad grupal se ha visto que la presencialidad y la interacción genera una energía especial y un plus. Y definitivamente se ha observado a muchas empresas el prestar mucha mayor atención sobre el bienestar del empleado creando programas de asistencia que atiendan su salud y su balance emocional y psíquico. Pienso que hacia el futuro encontraremos un punto medio y un sano balance, pero definitivamente ha habido una aceleración de plataformas tecnológicas virtuales y modalidades de interacción virtuales que están para quedarse. Sobre si las pandemias se volverán más frecuentes, ese tema se lo dejo a los médicos y científicos que seguramente podrán dar una opinión más fundada.