Matías Laurenz es Alumni MBA 2000 y, desde su paso por el IAE hace más de dos décadas, jamás cortó el lazo con la institución: desde convocar a profesores para trabajar en sus iniciativas, hasta participar del proyecto NAVES en varias oportunidades, Laurenz es un "reincidente" del IAE y un emprendedor nato. Te presentamos su historia.
Con la plataforma Fonselp, Matías Laurenz, de 47 años, va por su cuarto emprendimiento. Desde que arrancó la cursada del MBA con apenas 24 años, este administrador de empresas curioso y audaz no cesó de gestar proyectos que, en su mayoría, coinciden en un punto claro: tienen un impacto social.
"Dentro de las materias en el MBA tuvimos NAVES dictada por Silvia Torres Carbonell y fue la semilla de un árbol que dio múltiples frutos para mí", cuenta. De hecho, su primer emprendimiento nació durante la cursada del MBA, junto a su compañero Juan Cruz Mones Cazón.
"Juntos decidimos formar un proyecto social y creamos daunamano.org, un portal que unía voluntarios con ONGs. Fue un proyecto de pequeña escala que funcionó, pero nosotros queríamos ir por más, teníamos la intención de que nuestro proyecto trascendiera".
Entonces, Laurenz y Mones Cazón subieron la apuesta y crearon Res Non Verba, una asociación civil que derivó en una ONG y en un portal que creció mucho en relevancia. "Aquí fue cuando dimos un gran paso y nos fusionamos con Idealistas.org, un portal que conecta ONGs con personas. Para nosotros fue como jugar en primera", rememora Laurenz, quien a partir de esta fusión le puso fin a su trabajo en relación de dependencia en Techint y se aventuró 100% al emprendedurismo.
Barajar y dar de nuevo
El 2008 marcó un antes y un después en la vida emprendedora de Matías, ya que ese mismo año comenzó una desinversión de Idealistas que culminó con el cierre de sus oficinas en el país. Sin embargo, fiel a su espíritu creador, Laurenz vio en la crisis otra oportunidad de emprender y junto con algunos compañeros de equipo crearon la plataforma Wingu, como continuación de Idealistas.
"Nos presentamos en la competencia NAVES y ganamos en la categoría social. El mérito nos dio coraje para encarar la empresa sin fines de lucro de manera formal. Hoy, Wingu tiene oficinas en diversos países y a partir de este proyecto se crearon otros, como donaronline.org que aporta valor a más de tres mil ONGs procesando donaciones", explica.
Mientras tanto, Matías ya estaba ‘craneando’ su próximo emprendimiento…
"Noté que faltaba en el mercado un concentrador de pagos para los débitos automáticos y ahí surgió la idea de armar Centralpos.com, proyecto con el cual también nos presentamos en NAVES. A la firma Prisma Medios de Pago le interesó el proyecto, compraron la mitad de la compañía y fuimos socios durante seis años, hasta que ellos absorbieron el 100% de la empresa", explica.
Fonselp y su alianza con el IAE
En 2018 llegó su cuarto emprendimiento, Fonselp.org. "Existían plataformas que le daban el micrófono a las ONGs para que solicitaran ayuda, pero veía que faltaba una que le diera ese micrófono a una empresa o universidad, para que pudieran definir qué es lo que tenían para dar y, en base a eso, que las ONGs o emprendedores sociales les solicitaran ayuda en aquello que ofrecían", explica.
"Sé que es muy frustrante que a uno le pidan todo el tiempo cosas que no tiene o no puede dar. Entonces, Fonselp se planta desde el lado de la oferta: qué es lo que tengo para dar y con ese foco la escala es mucho mayor". El objetivo de Fonselp es claro: permitir que cualquier empresa o universidad pueda gratuitamente generar una acción de colaboración en minutos y conectarse con más de 4500 organizaciones en toda la región.
"No somos una red social ni competimos con ellas, somos una herramienta que compite contra el mail, el WhatsApp y contra el desgaste que muchas veces genera el proceso de colaborar", sostiene, y aclara que cuentan con una base de datos de casi 5 mil organizaciones de las cuales 70% son ONGs, 20% empresas y un 10% instituciones educativas.
Asimismo, el proyecto se sostiene económicamente en el largo plazo mediante una plataforma complementaria que maneja el ciclo de vida de los voluntarios para las organizaciones que desean escalar el voluntariado.
Desde el año pasado, Fonselp y el proceso de mentorías de NAVES trabajan en conjunto, ya que la plataforma le facilita la asignación de mentores a los proyectos que están involucrados en la competencia. "Fonselp resuelve la convocatoria de los mentores y su asignación a proyectos", dice Matías, y anticipa que la alianza se ha renovado por otro año más y seguirá dando sus frutos este 2021.