El Alumni Mariano Silveyra, que vive desde hace 14 años en Madrid, es el nuevo Country Manager de Blueground en España, una start-up de real state. El exvicepresidente de Asuntos Públicos de Cabify destaca el valor de reinventarse y de salir de la zona de confort para crecer profesionalmente.

Mariano Silveyra trabajó 14 años en YPF, pasó luego por Globant, estuvo cinco años en Cabify y desde noviembre pasado dirige el desembarco en España de Bluegroud, una start-up norteamericana de real state. El desafío es grande, es un sector nuevo para el Alumni de 47 años que vive en Madrid y además desde la pandemia, la compañía está en pleno crecimiento.

Pero algo que no amedrenta a Silveyra son los desafíos. “En el trabajo me gusta sentir que aporto valor, que maduro como profesional y como persona, que aprendo cosas nuevas. No me gusta estancarme”, resume.
Salir de la zona de confort parece ser casi un mantra en la vida de Silveyra, que además hace triatlón y tiene junto a su mujer tres hijos adolescentes.

Su carrera profesional comenzó en Repsol cuando se graduó en Ingeniería Aeronáutica en la Universidad de La Plata, en 1998. Pasó por todos los sectores de la empresa y vivió seis años en Madrid, cuando Repsol compró YPF.
Después volvió al país y se desempeñó en diversas áreas y roles, entre ellos como Director de Marketing en Downstream. En 2011 realizó el EMBA en el IAE, una experiencia que lo llevó a replantear su vida profesional. “El IAE me abrió la cabeza. Activó algo que yo tenía oculto y es ese inconformismo, ese deseo de saber, de querer cambiar las cosas, de querer mejorar y de no conformarse con tener un buen salario o estar en una buena compañía”, cuenta.

Una reinvención
Decidió entonces que era hora de “meterse en el barro” e ingresó en Globant, la compañía de software considerada una de las primeras unicornio de Argentina. “Yo estaba acostumbrado a otra cosa, a una corporación, a un mundo burocrático, a otro tipo de trabajo. Pasé a un sector y a una filosofía de empresa totalmente distinta. En Globant era todo en inglés, con gente súper joven había una dinámica colaborativa y ágil a la que no estaba acostumbrado”, dice. Salí completamente de mi zona de confort y me costó muchísimo. Sufrí hasta que me acostumbré, pero fue lo mejor que hice en mi vida profesional y el IAE tuvo que ver en eso”, recuerda.

En Globant trabajó cuatro años, en los que lideró proyectos de desarrollo de software con distintos clientes y se hizo experto en metodologías ágiles. Retornó a Madrid para abrir las oficinas de la empresa y dos años después le llegó una oferta de Cabify. Se convirtió así en director general para Europa y vicepresidente global de Asuntos Públicos de la empresa.

“En Cabify fueron cinco años súper interesantes, de muchísimo aprendizaje, en donde también pude aplicar muchos de los conceptos aprendidos en Globant para gestionar scale-ups de forma ágil, dice Silveyra que sigue conectado a Cabify con un rol de consejero.

Nuevos desafíos
Tras cinco años sin respiro, tuvo una oferta para trabajar en Blueground, una empresa que se fundó en 2013 y a diferencia de las plataformas de alquiler tradicionales, alquila propiedades directamente a los propietarios. La compañía ofrece una experiencia exclusiva, con departamentos amueblados con un alto nivel, totalmente equipados y listos para ser habitados.

El Alumni, que asumió como Country Manager de Blueground en España, dice que uno de sus primeros desafíos es crecer de forma eficiente. Por ahora son cinco los empleados en Madrid, donde vive desde hace 14 años,y planean multiplicar su tamaño por 10 o 20.

“La pandemia generó una explosión brutal en este nicho -explica el ejecutivo- porque con todo lo malo que trajo afianzó la idea de que se puede trabajar desde cualquier parte del mundo. Hay miles y miles de clientes altos ejecutivos, directivos, emprendedores de éxito, gente que trabaja para compañías tecnológicas, como Amazon, Google y Facebook, y Blueground les da la posibilidad de poder trabajar y vivir en cualquier lado, mientras te sientes en tu propia casa”.

Silveyra está contento con su nuevo rol. “Me genera una adrenalina positiva poder tomar decisiones”, dice y cuenta que además le entusiasma gestionar scale-ups, de perfil tecnológico y alta innovación que tienen un crecimiento brutal por delante.

“He aprendido mucho y creo que el principal desafío de crecer muy rápido es que sea de forma eficiente y sostenible”, dice Silveyra. El Alumni tiene experiencia en la materia, cuando estuvo en Cabify, la compañía creció más de 20 veces. Un desafío enorme si se tiene en cuenta que estas experiencias se viven en muy pocas empresas.

Salir de lo tradicional
Cuando se le pide un consejo para aquellos que están comenzando su carrera laboral, el Alumni insiste en que para él el crecimiento profesional se relaciona con no conformarse, con salir de lo tradicional. “Creo que, si estás en el IAE, evidentemente sentís ese gusanito de querer cambiar cosas y de querer conocer una mejor versión de uno mismo. Yo por lo menos fui al IAE buscando eso y creo que coincido con mucha gente que busca lo mismo. El querer encontrarse, conectar con tu mejor versión”, sostiene. “Me refiero a todos los aspectos, no solamente el profesional, sino también al punto de vista personal, de líder, familiar, porque el IAE toca muchísimo esa pata. Yo sentí una maduración muy profunda en este aspecto. El tema es luego aplicarla y para eso hay que animarse”, resume.