En la segunda parte de la jornada Pulso Laboral 2022, Matias Ghidini, Alumni EMBA 2003, General Manager de GhidiniRodil, y Cecilia Giordano, Presidente & CEO de Mercer en Argentina, Uruguay y Paraguay, ahondaron en perspectivas del empleo en el país.
“El mercado laboral argentino en 2021 vino muy rápido”, señaló Matías Ghidini mientras mostraba la foto de un auto a alta velocidad. “Ahora, nos estamos quedando sin nafta y estamos de vuelta con problemas de fondo”, advirtió.
En la segunda parte de la jornada Pulso Laboral 2022, el experto en RR.HH. aportó datos que pintaron al detalle la realidad del mercado laboral en el país. Bajó la desocupación en el cuarto trimestre de 2021 (del 11 al 7%) pero se mantuvieron iguales los niveles de subocupación y ocupados demandantes, indicó Ghidini. “Esto quiere decir que se recupera la cantidad de empleo, pero que la calidad retrocede”. Existen oportunidades, claro, pero son de nicho: “La recuperación del empleo es sectorial y heterogénea”, advirtió el especialista.
La expectativa neta de empleo en Argentina –que se refiere a las contrataciones por parte de empresas– según Manpower Group, es +12%. El 35% de las empresas planean aumentar su personal el segundo trimestre de 2022, mientras que el 22% esperan reducirlo y el 38%, mantenerlo.
“Puede parecer un dato positivo, pero es relativo en comparación con la región, donde la Argentina se posiciona muy por detrás de otros países”, mostró Ghidini. “La tendencia de la expectativa de empleo de hecho es hacia abajo”.
Pérdida del salario real y exportación sin control
“Desde hace cuatro años que en la Argentina el salario pierde contra la inflación y, por eso, nos sentimos un poco más pobres cada día”, explicó el Alumni.
“No conseguimos el talento que necesitamos para nuestras organizaciones. Los jóvenes se fueron del país o están acá pero trabajando para afuera”, expresó Cecilia Giordano, Presidente & CEO de Mercer en Argentina, Uruguay y Paraguay. “Estamos compitiendo con compañías que tienen la capacidad de tener dólares afuera y pagar salarios en dólares líquidos o en una cuenta afuera”.
En relación con este tema de la exportación de servicios, que dio mucho de qué hablar durante la charla, Ghidini agregó que la mayor parte de las personas que empiezan a trabajar para el exterior son senior o team leaders, fundamentales para el desarrollo de los juniors. “Más allá de la parte económica, estructuralmente estás perdiendo las cabezas. En algún momento hay que ordenar esta situación y buscar un marco legal en el que ganen ambas partes”.
A este fenómeno se suma un auge en la demanda de perfiles tecnológicos y las dificultades para dar con este talento. Al respecto, Giordano remarcó: “Desde hace años que hablamos de upskilling y reskilling, ¿pero cuántas empresas hemos realmente invertido en esto? ¿Cuántas excluimos a mayores de 45 a 50 años, por no tener habilidades? Con un entrenamiento podemos darles nuevas oportunidades. Desde nuestro metro cuadrado tenemos mucho para hacer”.
Gente que no consigue empleo, compañías que no consiguen talento
Ghidini volvió varias veces sobre la desconexión actual entre la oferta de empleo y la demanda. Los sectores industriales que “explotan” por el gran crecimiento de trabajo son: fintech, agtech, healthtech, edtech, servicios e insumos de salud, y laboratorios.
Entre los perfiles más demandados, el experto enumeró:
- Enfermería, técnicos de anatomía patológica, anestesiología y esterilización.
- Ingenieros en informática, sistemas y electrónica.
- Lic. en sistemas y ciencias de la computación.
En relación con los nuevos modelos híbridos de trabajo, Ghidini señaló que muchas empresas quieren que vuelvan sus empleados a trabajar de forma presencial, y la respuesta de muchos candidatos es finalizar el proceso de entrevista laboral por este motivo.
El alquiler de las oficinas y hasta la disposición del espacio dentro de ellas, son todos factores en crisis en este momento en un mercado que tiene más dudas que certezas.
“Tenemos un retorno a un mercado laboral estructuralmente debilitado, sin soluciones de fondo, con informalidad, con una reforma laboral postergada, y con una desconexión entre la oferta y la demanda. La Argentina adolece de un plan estratégico a largo plazo”, concluyó Ghidini.