Los Alumni Matías O'Keefe y Pablo Vaquero cuentan su experiencia con Ucrop.it, una plataforma colaborativa dedicada a mejorar el rendimiento de los productores agrícolas, realizando el seguimiento de la trazabilidad de cultivos sostenibles

Uno de los retos que enfrenta el mundo es enfocarse hacia una producción sustentable de alimentos. Para ello, es necesario generar cambios en los procesos de producción del sector agropecuario para lograr registrar y verificar prácticas sustentables que puedan ser compartidas con los actores de toda la cadena de valor.

Ucrop.It nació como una solución digital que tiene el objetivo de impulsar la sustentabilidad en los cultivos en un proceso simple, lograble y rentable. La plataforma ofrece a los productores, de manera gratuita, conectarse con las empresas a fin de conciliar los objetivos de producción.

“Es una plataforma donde los agricultores pueden hacer seguimiento de sus procesos y logros en sustentabilidad a lo largo del proceso de producción garantizando los datos ingresados gracias a la seguridad de blockchain y de forma gratuita”, explica el CTO & CoFounder del proyecto, Matias O’Keefe.

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“Ofrecemos luego a los productores múltiples oportunidades para trabajar en alineación con empresas que van desde exportadores hasta proveedores de insumos, genética, fertilizantes o incluso banca, en todos los casos buscando que el trabajo conjunto agregue valor al productor y lo lleve a una mayor rentabilidad”, agrega el Alumni.

Según describe, esta plataforma permite la simplificación del seguimiento de la sustentabilidad apoyada en imágenes satelitales y análisis de zonas. Además, hace un seguimiento de los compromisos tomados entre los productores y las distintas compañías. El proceso es apoyado por una red que hoy cuenta con treinta ingenieros agrónomos de la empresa que acompañan al productor para que tenga éxito en estos procesos.

El startup surgió en 2018 luego de varios años de trabajo de investigación de sus creadores, Diego Hoter (CEO y co-founder), Marcos Botta (CIO y co-founder) y Matías O’Keefe (CTO y co-founder), incentivados por la aplicación la tecnología Blockchain y su potencial para transformar todas las industrias. De esta manera, encontraron la necesidad de mejorar la forma de relacionar a los productores con los diferentes actores del mercado agrícola del sector sustentable.

A estos emprendedores se sumaron varios partners del agro y la tecnología, como Cazenave y Asociados, Lyncros SRL y el ex vicepresidente de Monsanto en Latam -y también Alumni-, Pablo Vaquero. Todos ellos vieron la oportunidad de crear una solución que verifique las prácticas agrícolas de productores del campo, alineadas a estándares relevantes de sustentabilidad en forma escalable, simple, remota, certera y medible.

El proyecto fue financiado inicialmente por las empresas asociadas y con eso lograron desarrollar una primera plataforma con la que pudieron trazar unas 20.000 hectáreas de algodón en contratos con Indigo y Gensus. En paralelo a la operación fueron sumando el proyecto en varios concursos y procesos de aceleración de startups con los que comenzaron a tener muy buenos resultados.

“Ganamos Startup Chile, nos eligieron para un proceso de aceleración de Creative Destruction Labs en Canadá y varios otros que nos empezaron a validar y dar exposición”, comenta O’Keefe que destaca la importancia de punto para quienes estén buscando desarrollar su idea de negocio. “Es una gran herramienta para no perder tiempo. Con estos procesos tienen la oportunidad de qué gente muy calificada en la evaluación de negocios con potencial de escala puedan dar una devolución de la viabilidad de los negocios. Si es para mal, te obligan a repensar los modelos, si es para bien, logras una exposición clara con un ecosistema que está esperando encontrar empresas de alto potencial”, detalla.

Los resultados del negocio no tardaron en llegar: en el segundo año de operación, pasaron a trazar más de 300.000 hectáreas con dos grandes clientes corporativos y desde ese momento continuaron construyendo la base de productores. Actualmente trazan casi un millón de hectáreas en Argentina, Paraguay, Uruguay y Estados Unidos, y levantaron en una ronda de inversiones en diciembre de 2021 unos tres millones más, con ya casi 30 clientes corporativos aportando para la generación de ecosistemas sustentables.

En vistas al futuro, O'Keefe tiene una meta muy clara: “Apuntamos a crecer fuerte en 2023 en Estados Unidos y empezar a tener pilotos en otros continentes, para eso estamos trabajando en cerrar una serie A que nos permitiría replicar lo aprendido mucho más rápido en esas geografías. Por otra parte, a largo plazo, nos queremos posicionar como plataforma global buscando ser cada vez más simples de usar y generando más beneficios para los productores por diferenciación y sustentabilidad”.

Potencial a futuro

Por su parte, para Pablo Vaquero el potencial de Ucrop.it podría centrarse en que, con el crecimiento de la demanda de alimentos sustentables en los últimos años, se ha generado una demanda que se traduce en las distintas formas de producción las cuales deben ser demostradas y verificadas.

“En ese sentido, este startup viene a ocupar ese espacio de poder verificar el proceso productivo sostenible y esto agrega un valor que, para el productor que usa la plataforma es gratuito, pero para el comprador, que finalmente va a poder colocar el producto en los mercados internacionales, tiene importancia” explica Vaquero

Para él este es un camino que, de a poco, se va consolidando y terminará siendo una herramienta que tendrá cada vez más llegadas de manera internacional, con la esperanza de que Ucrop.it se convierta en uno de los unicornios dentro de la agricultura argentina.

Experiencia en el IAE

“Es difícil ver que es lo que uno aplica de lo que aprende” expresa Vaquero. Según el empresario, lo que uno tiene son herramientas que va adquiriendo en su paso por los diferentes programas de estudios y finalmente es la práctica la que, a veces de forma intuitiva y otras veces de forma calculada y pensada, poder llegar a un resultado final. “Pero tanto la experiencia como el estudio son cosas acumulativas y nos van marcando el camino para hacer nuestros propósitos un poquito mejor y alcanzar un resultado”, remata.

Vaquero tuvo dos pasos por el IAE, el primero -en 1997- trabajando en Monsanto y pudiendo aplicar los aprendizajes que tuvo a lo largo de su extensa carrera en una corporación del agro. Pero resalta: “luego, en el 2015 me toco la oportunidad de empezar algo particular con una empresa de semillas de algodón en el Chaco, y a los pocos años apareció la oportunidad de Ucrop.it, por lo que en ese momento tuve que realizar un replanteo de un montón de aprendizajes y focalizarlos en lo que era una PyME o una startup”

Según relata, en aquel momento lo que él hizo fue realizar el programa de Dirección de la Pequeña y Mediana Empresa en 2017 el cual le dio una visión mucho más “bajada a tierra” de las oportunidades que hay, cuando se realiza proyectos como emprendedor. “Sumado a eso, las diversas experiencias tanto mías como de otros colegas que fui canalizando para lo que luego fue el proyecto de Ucrop.it.” concluyó el empresario.